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había llegado sin mucha confianza
a causa de las dificultades que tuvo para
completar la Vuelta a España hace
algunas semanas, que lo llevaron inclusive
a pensar en no participar en los Mundiales.
Sin embargo, el día de la prueba
se la jugó toda y logró lo
inesperado. "Salí a hacer una
contrarreloj sin más", explicó.
"No esperaba estar así".
Botero dijo estar "feliz, emocionado
y sorprendido", y le dedicó
el triunfo a su Colombia "querida"
y a su abuelo, quien falleció antes
de comenzar la Vuelta a España.
El recorrido del colombiano fue perfecto.
Comenzó pedaleando a un ritmo constante
en los dos primeros tercios de la prueba
y en los últimos 10 Km apretó
el paso y acabó con las esperanzas
de todos sus rivales.
Por otro lado, Víctor Hugo Peña,
quien también participó en
la prueba, finalizó en el puesto
34, a 2.32 minutos del antioqueño.
Aunque Colombia ya había ganado
dos medallas de oro en mundiales de ciclismo
con Martín Emilio "Cochise"
Rodríguez y Marlon Pérez,
la de Botero es la primera que un pedalista
de nuestro país consigue en contrarreloj
individual. Tanto "Cochise", quien
fue campeón en los 4000 metros persecución
individual en 1972, como Pérez, quien
en 1994 se llevó la prueba por puntos
en la categoría juvenil, siguieron
atentamente cada pedalazo de Botero y al
final dijeron estar muy contentos y orgullosos
con la nueva medalla.
Indiscutiblemente, este paisa es uno de
los más grandes de la historia del
ciclismo nacional y está entre los
mejores del mundo en la actualidad. Sus
actuaciones en el Mundial, en el Tour de
Francia y hasta en la Vuelta a España,
donde a pesar de todo logró ganar
una etapa, demuestran que mientras todo
marche bien, muy pocos pueden con él.
Aun así, Botero prefiere la discreción
y sabe que no quedará satisfecho
hasta no llevarse la victoria en alguna
de las grandes competencias del calendario
internacional, especialmente en el Tour.
"No quisiera retirarme sin ganar una
de las carreras grandes del mundo",
dice. Pero el paisa apenas va a cumplir
30 años, y todavía tiene mucho
camino por recorrer y muchos triunfos por
alcanzar. Esa carrera grande de la que habla
no tardará en llegar.
Ahora, el paisa está ansioso de
volver a su casa en Colombia. "Quiero
llegar a casa y comerme unos buenos frijoles",
dijo en una entrevista con el periódico
El Tiempo. El próximo año
promete bastante. Botero tiene algo que
tienen muy pocos deportistas en nuestro
país, que es la capacidad de soñar
con cosas grandes y trabajar duro para hacerlas
realidad. Este antioqueño sigue —y
seguirá por mucho tiempo— haciendo
historia y llenando a Colombia de orgullo
y de motivos para celebrar.
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